La carne de la raza Wagyu es una de las más selectas del mundo. Esta raza, cuyo nombre significa ‘vaca japonesa’, fue introducida en el país nipón en el siglo II de nuestra era. Su objetivo no era otro que ser animal de carga. Sin embargo, a medida que el consumo de ternera fue siendo importante en las altas esferas y tenía un valor económico considerable, los granjeros comenzaron a contratar a obreros para que masajearan los lomos de los animales con el objetivo de mejorar la calidad de la carne. Este exquisito trato a los animales y la calidad que se ha conseguido ha hecho que esta raza sea reconocida internacionalmente como la mejor del mundo y una de las más saludables. Es más conocida como ‘carne de Kobe’, ya que es originaria de esa parte de Japón, en la que la escarpada orografía permitió que la raza originaria no se cruzara con otros animales durante siglos y mantuviera unas características únicas. Aunque hemos de puntualizar que wagyu es la raza y ‘Kobe’ es la denominación de origen exclusiva de Japón.

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La raza Wagyu se exportó durante algunos años a otras zonas del mundo y ahora puede encontrarse más cerca de lo que parece. Un ejemplo es La Finca Santa Rosalía, del Grupo Altube, que se encuentra en la localidad burgalesa de Vizmalo, justo al lado de la transitada autovía A-62.

Los animales disfrutan de una alimentación absolutamente única que se compone entre otros muchos ingredientes de forrajes verdes, copos de cereales y vino ecológico de la propia bodega como fuente natural de antioxidantes. Además, gozan de las más modernas instalaciones de cría semiextensiva, las cuales han sido diseñadas para garantizar el máximo bienestar y confort animal, habiendo sido provistas por ejemplo de hilo musical o de camas biodegradables, las cuales son reutilizadas posteriormente como abono orgánico en la propia finca.

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Ante los problemas burocráticos para la importación de carne, el empresario Patxi Garmendia pudo importar sementales puros y embriones llegando a conseguir, tras mucho esfuerzo una genética propia, basada en una selección de animales de las líneas Wagyu más puras, los Wagyus de ‘Santa Rosalia’. Los animales, cuidando estrictamente todos los requisitos del bienestar animal, son sacrificados libres de estrés, por ello, el transporte hasta el matadero se realiza en sus propios camiones para que los animales viajen tranquilos, siendo acompañados por el mismo personal que los cuida, no teniendo que esperar a la entrada ni tampoco mezclarse con otros animales.

(Fuente de las fotos: Flickr)